En el post de hoy miramos hacia el suelo, hacia lo que pisamos porque tiene más interés que nunca. Los pavimentos decorados han vuelto con mucha fuerza; la tendencia decorativa que rescata el preciosismo de la época modernista ha dado como fruto el resurgir de las baldosas hidráulicas y, por extensión, el diseño de multitud de motivos de este estilo, tanto en azulejo o pavimento cerámico como en gres porcelánico.
Tanto amor le tengo que ya he instalado uno de estos pavimentos en la entrada de nuestra casa en mi pueblo; en el post de mañana precisamente se puede ver un trocito del mismo. Adoro la geometría de estos suelos, que potencia el mobiliario, propiciando un entorno ya decorado. No sé si me explico, lo que quiero decir es que, el hecho de que el suelo en sí ya sea un motivo de atracción consigue que la estancia, desde un principio, se vea decorada y vestida.
Así que, motivada por una preciosidad tras otra, he hecho una selección de pavimentos que colocaría ya mismo si estuviera metida en alguna reforma que lo requiriera. Y me he dado cuenta de que todos son muy potentes, dejamos los lisos para otro post!
Como véis, pavimentos que imitan el preciosismo de la baldosa hidráulica pero sin llevar asociado el mantenimiento que necesita ésta. Los estamos viendo muchísimo en proyectos de inspiración vintage. Más allá de hidráulicos o barros y azulejos pintados a mano, tenemos una gran diversidad de diseños. Creo que una de las firmas que antes apostó por este estilo es Vives Cerámica, con un amplio catálogo (la serie 1900 sobre todo). En la imagen 2 y 3, serie Vodevil también de Vives, y en la 5, Terrades, de la misma marca. ¿Algo más discreto? Mira la serie Azur de Aparici. La imagen 1 también es de la misma firma.
La imagen inferior es un hidráulico de Entic Designs (no me he podido resistir, adoro este diseño llamado Kaleidoscope, así que el post debería ser 9+1 pavimentos). La imagen que sigue a continuación de ella es el modelo Macaya Humo de Vives, que me parece muy inspirada en otro diseño de Entic Designs.
De Natucer son los rombos de la imagen superior y el pavimento de la inferior (su folleto Concret me ha dejado sin palabras), tanto aptos para revestimiento como para pavimento, como sucede con la mayoría de los modelos que os muestro en este post.
Y un clásico, con estrellas en tonos azules, de Mainzu, quien también tiene una buena selección de azulejos y pavimentos en cerámica y de corte modernista.
Si os dáis cuenta, todos los pavimentos son de marcas españolas, nuestra industria es una de las más fuertes a nivel mundial, así que no hace falta irse muy lejos para encontrar lo último en diseño e innovación. Y no sólo en diseño, también en técnica; por ejemplo, la empresa Rubi fue la que inventó la cortadora manual de cerámica, y siguen dando la mano a los profesionales, a través de su blog en el que, entre otros, quieren mostrar los mejores proyectos hechos con cerámica y con herramientas de corte Rubi, como se puede ver en este link. Lo cierto es que, por muy bonito que sea el material, por muy bien elegido que esté y por muy contentos que estemos imaginando el resultado final, si no está bien cortado y colocado, no quedaremos satisfechos.
¿Estáis pensando en alguna reforma? ¿Os gusta este estilo de pavimento?
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