La semana pasada me llevé una buena sorpresa al pasar por el blog Cámara de Maravillas. En su entrada, nos hablaban de la colección de cerámica Rimini Blu, firmada por Aldo Londi para la casa italiana Bitossi. Cuando empecé a ver las imágenes del post, una ola de familiaridad me invadió. Las características piezas de la colección tienen un azul intenso, que "se consigue aplicando primero mediante una brocha rayas de color azul verdoso y negro. Después se sumerge la pieza en un baño semi-transparente de esmalte azul y luego se rocía con el mismo esmalte mismo para obtener una superficie más uniforme tras la segunda cocción. Todos los objetos se cuecen dos veces a temperaturas de 1020 ° y 830 °.", según explican en el blog.
Pues bien, hará unos quince años, mi abuela me regaló esta jarrita, que tenía en su cocina y que compró en un viaje a Italia. Ella era una enamorada de ese país, que visitó en un montón de ocasiones, y quizá por ese influjo terminé estudiando una temporada en Turin, durante el Erasmus. Todo lo italiano le encantaba, y a mí también. El caso es que esta jarra está irremisiblemente ligada a mi yaya y por eso me trae muy buenos recuerdos y, que me lo corrobore Cámara de Maravillas, pero realmente parece una pieza de las de Aldo Londi, aunque no me importa que sea o no una original, me encanta:
Y aquí algo más de inspiración que he encontrado por la red, ahora que puedo llamar a la jarra por su nombre, Rimini Blu.
En Wunderkammer, además, tienen algunas piezas a la venta.
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